SEXO Y SUSTANCIAS ESTIMULANTES ¿AMIGOS O ENEMIGOS?

Hay muchas personas que combinan sexo y alcohol o sexo y drogas ¿será una buena combinación? Aunque es un tema muy amplio, hoy queremos dedicarle algunas líneas.

Recordemos primero que el sexo es un estimulante, por eso hay quienes dicen que el sexo puede ser como una droga e incluso se conocen de casos de adictos al sexo. Muchas personas consideran entonces que consumir sustancias psicoactivas aumentará los estímulos recibidos y por tanto será más placentero el sexo ¿verdad o mentira?

Aunque el alcohol puede desinhibir un poco y hacer que estén un más espontáneos en el encuentro sexual, es importante recordar que puede afectar algunos estímulos sensoriales. Inclusive algunos estudios apuntan a que si bien el alcohol puede ayudar a desinhibirse, no en vano le llaman “lubricante social”, las personas disfrutan menos del sexo cuando están bajo el efecto de esta sustancia. Una copa de vino o champaña antes del acto sexual, puede ser romántico o sensual, pero el exceso de alcohol puede llevar a diversos problemas como disfunción eréctil o insensibilidad. También recuerda que un número importante de embarazos no deseados se producen por las relaciones sexuales bajo el efecto del alcohol y otras sustancias.

Muchas de las drogas pueden generar encuentros sexuales más intensos o potencializar la capacidad sensorial, por lo que algunas personas les llama la atención tener sexo bajo sus efectos. Sin embargo, cambian la forma en la que tomamos decisiones y hacen que se olviden límites y se obvien consideraciones como si se tiene o no pareja, si se puede contraer una enfermedad de transmisión sexual, entre muchísimas otras cosas que pensamos normalmente.

Aunque cada droga puede generar un efecto distinto, es necesario conocer las consecuencias y los efectos secundarios de cada una, especialmente relacionadas a la salud sexual. Hay que tener en cuenta que algunas sustancias pueden interferir en el orgasmo y otras afectar la erección.

Incluso, muchas personas usan algunas sustancias como lo barbitúricos para hacer más fácil el abuso sexual de la víctima. También algunas personas que tienen varias jornadas de sexo en un día o con más de una persona, hacen uso de ciertas sustancias para “aguantar” más tiempo y no cansarse tan fácilmente.

No creas del todo en la experiencia de tus amigos o conocidos si te dicen que les fue muy bien con alguna sustancia durante su relación sexual. Cada droga puede tener efectos distintos e impredecibles, dependiendo de cada organismo y del momento en el que se consume. Por eso, debe tenerse cuidado con conductas no deseadas, ya que cabe recordar que podemos controlar acciones e impulsos cuando estamos sobrios, pero no cuando estamos bajo el efecto de alguna sustancia psicoactiva.

No olvides que a largo plazo, muchas de las drogas generan disfunción eréctil y crean dependencia, no solo en la vida diaria, sino para sentir placer sexual, alterando tu vida sexual normal.

Lo recomendable es que sea el sexo el que genere muchas sensaciones en tu mente y en tu cuerpo, sin necesidad de usar sustancias psicoactivas. Si es lo suficientemente estimulante, no será necesario consumir nada más. Antes de consumir estimulantes químicos, sería mejor recurrir a otras técnicas estimulantes, incluso al tantra o el yoga o inclusive explorar mejores formas de sentir placer (posiciones, juegos, etc,).

Nada mejor que ambas partes estén conscientes de lo que hacen, lo que quieren, de cada momento y cada acto que acompaña la relación sexual. Por eso, ¡deja que sea tu imaginación tu mejor estimulante sexual!