SOY GAY ¿COMO LE DIGO A LOS DEMÁS?
- Maria Carrasco
- May 10, 2016
- 3 min read

Descubrir y aceptar que eres homosexual no es un proceso fácil, pues estamos educados en un contexto homofóbico, en el que lo “normal” es que la mujer se case con un hombre y el hombre con una mujer y tengan hijos, nietos, bisnietos y así sucesivamente. La diferencia no tiene cabida o es difícilmente aceptada, por lo que ser gay no es fácil ni para la persona ni para su familia.
En esta ocasión daremos algunas ideas y recomendaciones para contarles a tus padres que eres gay, pero dadas las diferentes personas y familias, piensa cuáles de estas ideas aplican y cuáles no o necesitan ajustes.
ANTES DE CONTARLES
*Intenta comprender a tus padres. La mayoría de los padres quieren lo mejor para sus hijos y en ese afán de que tengan lo mejor y lleguen lejos, imaginan una vida para ellos en la que no está que el hijo sea homosexual. Ellos también fueron educados en una sociedad homofóbica y van a pensar en qué dirán sus familiares y amigos. Recuerda que para ti también fue difícil el proceso de aceptación.
*Siempre está la incertidumbre de cómo van a reaccionar. Depende de muchos factores como la relación padres-hijos, sus historias de vida, el nivel educativo que tengan, las condiciones, etcétera. Piensa en todos los escenarios, no para asustarte, sino para prepararte.
*Piensa que es importante decirles la verdad porque seguramente son las personas que más quieres, a quienes les debes muchas cosas.
*En algunos casos, es bueno ir abriendo el terreno para que ellos vayan sospechando que eres gay. De esta manera cuando les cuentes ya habrán contemplado la posibilidad y el choque puede ser menos duro. Hay quienes permiten que ellos tengan algunas pistas (por ejemplo al no ocultarles que vas de fiesta o a una comida con un amigo de tu mismo sexo).
*Es recomendable que le digas primero a la persona más cercana de tu familia, inclusive alguno de tus hermanos. Luego piensa si es más conveniente decirle primero a tu madre que a tu padre o lo contrario. Ya una vez que uno de ellos haya hecho el proceso, puede ayudar al otro a que lo haga de mejor forma.
*Piensa el momento y el lugar apropiado. También piensa qué les dirás y cómo. Puede que te ayude empezar con una carta, leérsela y ahí sí que comience el diálogo, o puede que te sientas mejor hablando lo que te va naciendo. Depende de ti.
*En ocasiones un momento inesperado es en el que se dan las cosas para dialogar.
DURANTE LA CONFESIÓN
*Es el momento más difícil. Así los conozcas mucho, no sabes a ciencia cierta que reacción van a tener. Debes estar preparado porque como cualquier ser humano en un momento de shock, pueden descontrolarse y decir cosas que te pueden herir, aunque no sea su intención.
*Intenta estar tranquilo y demostrar mucha seguridad para que no vayan a pensar que puede ser momentáneo o que estás confundido.
*Aclárales primero que ellos te han enseñado muchas cosas y muy seguramente una de ellas es decir la verdad y confiar en ellos. Es importante que todos comprendan que hablarles de tu orientación sexual y mostrarte como realmente eres, es un acto de sinceridad y amor.
*Diles que comprendes que es difícil para ellos y que tu intención no es generar dolor. Recuérdales que para ti también fue difícil aceparte a ti mismo y que es difícil ocultarles por más tiempo algo tan importante como tu orientación sexual.
*Aclárales lo importante que son para ti y el por qué necesitas de su apoyo.
*No se cohíban de llorar y expresar sus sentimientos.
*No dudes en recomendarles que acudan a terapia psicológica si lo consideran necesario.
DESPUÉS
*Dales su espacio. Puede que estén extraños varios días, debes estar preparado para eso. Intenten hablar de otros temas y hacer otras actividades juntos mientras atraviesan por el proceso de aceptación.
*También deja que procesen una noticia que no esperaban. Ten mucha paciencia con los comentarios y reacciones iniciales. Hay que esperar a que ellos pasen por el proceso de psicológico necesario para llegar a la aceptación.
*Todos somos diferentes. Seguramente tendrás amigos a los que sus padres los aceptaron rápidamente y otros que les pidieron se fueran de la casa. No necesariamente tus padres van a reaccionar como los de tus amigos o conocidos.
Luego de hacer esa confesión, vas a sentir que te quitas un peso de encima, que ya no debes mentir ni ser quien no eres en tu propia casa y ante quienes más quieres.
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