5 ZONAS ERÓGENAS QUE MÁS EXCITAN A LOS HOMBRES

Hay zonas de nuestro cuerpo más sensibles al tacto y que generan mayor placer. Pues bien, hoy en nuestro blog hablaremos de las zonas erógenas de los hombres.

Cada parte del cuerpo transmite sensaciones diferentes y puede estimularse de manera distinta. Como todo en el sexo, recuerda antes que nada que no todos sentimos lo mismo ni hallamos gusto en las mismas cosas, por lo que debes explorar qué zonas del cuerpo de tu chico son las que le excitan y de qué manera le resulta más placentero el contacto físico.

Para empezar, puedes acariciar el cabello, ya que da una sensación de relajación, que puede ser muy apropiada antes del acto sexual. Las orejas, son muy sensibles. Puedes besar o incluso morder los lóbulos de las orejas de tu pareja.

Sin duda, estimular la boca es un buen comienzo y una primera fase de excitación fundamental, especialmente, el labio inferior el cual tiene varios receptores nerviosos. Ahora pasa al cuello y llénalo de besos acompañados de caricias, de preferencia cerca de la tiroides.

Aunque son más sensibles los pechos femeninos, los pectorales y los pezones del hombre pueden generar mucho placer, no dudes en besar, lamer, acariciar, incluso apretar o pellizcar suavemente.

Recuerda que el vientre bajo es muy sensible a las caricias. Entre el ombligo y la pelvis el flujo sanguíneo junta tensión sexual.

El glande es la zona erógena más excitante, ya que puede haber un placer intenso. No en vano el sexo oral resulta tan placentero para un hombre. En la punta del pene se encuentran los nervios sexuales del hombre. Si te interesa ser más preciso puedes tomar una clase de anatomía práctica y ver qué pasa en cada zona.

El escroto también es muy excitante. Deben usarse caricias muy suaves con la yema de los dedos. Estimular con lengua o dedos y con exagerada delicadeza el pliegue que separa ambos testículos puede llevar al cielo a tu pareja. El frenillo también tiene muchas terminaciones nerviosas que pueden excitar a un hombre. En toda esta región recuerda controlar tus impulsos desenfrenados para evitar generar dolor.

No olvides acariciar y lamer la parte posterior del escroto, entre el pene y el ano, en el perineo. Cabe recordar que la glándula prostática tiene un gran potencial orgásmico, por lo que es fundamental una suave estimulación por toda esa área. Aunque muchos hombres son muy reticentes a que la pareja toque su ano, se ha comprobado que es uno de los puntos más sensibles y en los que se puede sentir más placer, ya que en su interior se encuentra la próstata.

Otras partes del cuerpo que transmiten sensaciones intensas son el muslo, especialmente la parte interna. Incluso los talones tienen un punto que puede disparar el deseo sexual. Intenta también estimular los pies y acariciar sus dedos (hay quien se atreve a chuparlos).

Explora a tu pareja y descubre cuáles son sus zonas erógenas y cómo logras excitarlo. Comienza por zonas erógenas menos estimulantes y ve escalando hasta llegar a la cima de la excitación y el placer.