¿EXISTE EL GAYDAR?

Si conoces a alguna persona homosexual, muy probablemente has escuchado hablar del gaydar. La expresión gaydar es la contracción de las palabras gay y radar y hace referencia a que las personas homosexuales, hombre y mujeres, pueden identificar más fácilmente quién es gay y quién no con analizar su apariencia física. Ahora, hay distintos niveles del gaydar que van desde sospechar que la persona tiene pocas probabilidades de ser gay hasta que es casi seguro que lo sea.

Esta habilidad ha generado interés inclusive en la comunidad científica. Se han desarrollado algunos estudios que respaldan la existencia del gaydar y que comprueban que las personas homosexuales aciertan más en la identificación de la orientación sexual. La revista PlosOne publicó un estudio que demuestra que las personas homosexuales de la muestra lograron acertar en un 60% la identificación de homosexualidad con sólo ver fotografías y que el radar funcionó con un pequeño vistazo. Se ha relacionado los ojos, la boca, el corte de cabello y también la distancia entre cada una de esas partes como elementos para detectar quién es homosexual.

Cabe recordar que también hay algunos estudios que ligan factores genéticos y biológicos con la homosexualidad, por lo que el gaydar puede responder también a las diferencias entre el cerebro de los heterosexuales y los homosexuales.

Sin embargo, algunos científicos han refutado estos estudios y han afirmado que el gaydar no es preciso y que incluso ayuda a reforzar estereotipos sobre la homosexualidad, pues limita cómo deben ser físicamente las personas con esa orientación sexual. Incluso, existe otro estudio que afirma que muchos de los homosexuales tienen rasgos más masculinos que los heterosexuales, lo que cuestionaría la validez del gaydar.

En cualquier caso, es importante tener en cuenta que más que un poder mágico o una habilidad mecánica, se trata de una sensibilidad mayor de las personas homosexuales, muchas veces dada por la propia experiencia, el contacto con otras personas gay, entre otros factores. Aunque el gaydar se relaciona generalmente con evaluar sólo los rasgos de la cara, es un hecho que una persona homosexual al ver otra persona de su misma orientación puede reconocerlo no sólo por su apariencia física, sino por sus comportamientos, sus expresiones, su relación con los demás, sus miradas, entre otros factores con los que se puede sentir identificado.

Obviamente, como toda práctica humana puede fallar, es decir el gaydar puede “descomponerse”, pues no se trata de un proceso mecanizado con estándares y metodologías definidas, sino de algo así como un presentimiento o la sensación de que una persona es homosexual. Incluso algunas personas homosexuales afirman que a ellos no les funciona el gaydar.

Si tienes un amigo o conocido homosexual probablemente puede ser tu consultor o consultora para saber si alguien a quien conoces es o no gay. Ahora, recuerda siempre que es una opinión personal de un ser humano y no una verdad científica.